son adecuadas para la extracción de muestras de sangre, inyecciones intravenosas o intradérmicas, así como para la preparación de medicamentos.
La superficie de la aguja hipodérmica está pulida electrónicamente con ultrasonido y recubierta con lubricante médico a base aceite de silicona
para asegurar una fácil penetración y que la inyección sea lo menos dolorosa posible.